Preparación

1. Se disuelve el azúcar en la mitad del agua y se pone a fuego medio. Se añaden las ralladuras y los zumos del limón y la naranja, y se deja hervir durante 15 minutos, para que se forme un almíbar.
   
2. Antes de seguir adelante, se puede pasar por un colador este jarabe, para quitar las ralladuras. Yo no lo he hecho porque mi rallador lo deja muy pequeño, y así tiene más sabor
   
3. Mientras tanto se pone la gelatina en un cazo con el resto del agua y se pone a fuego suave para que se disuelva por completo.
   
4. Se añade al almíbar y se deja cocer todo junto, moviendo con una cuchara de madera, hasta que se consigue el punto de hebra. Para conocer el punto adecuado, se echa un poco de almíbar en un bol de agua fría, y se ve que se hace una hebra
   
5. Se prepara una fuente rectangular, pincelada con aceite de girasol o cualquier grasa que no tenga sabor, y se vierte la mezcla, se deja enfriar y se reserva en el frigorífico hasta que tiene la consistencia adecuada como para cortar dados de unos dos centímetros. Yo los he cuajado en una cubitera de silicona
   
6. Por último se mezcla la maizena con el azúcar glass y se rebozan las delicias para que no se peguen unas con otras. Se conservan bastante tiempo en un recipiente hermético
   
7. Observaciones:
   
8. Hay que tener cuidado con el punto del almíbar. En las primeras que hice, se me pasó y... en vez de delicias turcas me han salido unos caramelos riquísimos con sabor a cítricos Para la segunda tanda me había quedado sin azúcar suficiente... así que las he hecho con azúcar morena de caña, lo que le da un color más oscuro al dulce En lugar de agua de rosas he puesto agua de azahar... lo que tenía en casa Se pueden aromatizar con menta, vainilla... y siempre le sientan bien los frutos secos El dulce original se debe cuajar con almidón, pero yo he usado gelatina neutra