Preparación

1. Una cocotte es para toda la vida si la cuidas bien. Y entre esos cuidados es importante no someterla a cambios bruscos de temperatura, que pueden quebrar el vitrificado. Por eso, es importante ponerla a calentar a la vez que se enciende el horno, para que se vaya calentando poco a poco.
   
2. Para hacer el bizcocho, se empieza separando las yemas y las claras. Las yemas se ponen en un bol y se baten con 250 g de azúcar hasta conseguir que se incorpore bien el azúcar, debe quedar una masa aireada y esponjosa en la que se hacen burbujas que aforan a la superficie, como puedes ver en el video.
   
3. A la masa de yemas y azúcar, se incorpora la nata mientras se sigue batiendo para que se integre bien. Luego se añade la harina tamizada con la levadura, y la ralladura de un limón. Se sigue batiendo para hasta conseguir una masa homogénea, pero sin batir demasiado, no importa si queda algún grumito, porque en el horno desaparece.
   
4. En otro recipiente se baten las claras a punto de nieve, y se le incorpora poco a poco el azúcar restante (100 g), hasta conseguir un merengue firme.
   
5. Cuando se ha integrado la harina, se añaden unas cucharadas del merengue y se mezcla bien todo, y por último se incorporan el resto de las claras montadas y se mueve con suavidad y movimientos envolventes, a paletadas, para evitar que se baje el merengue
   
6. Se saca la cocotte del horno y se engrasa con un poco de mantequilla, se cubre el fondo con un papel de hornear también engrasado, y se pone en él la masa del bizcocho y se cubre con los piñones y dos cucharadas de azúcar repartidas por la superficie.
   
7. Se hornea con la cocotte tapada durante 10 minutos a 200º y luego se retira la tapa y se hornea 35 minutos a 180º. Pasado este tiempo, se pincha con un palito de brocheta,y si sale limpio, es que está bien cocido.