Preparación

1. Para el bizcocho de vainilla se utilizan los mismos ingredientes que los reseñados para el bizcocho rojo, que aparecen en el apartado de los ingredientes. Solo que hay que poner justo el doble, 360 g de harina, 220 g mantequilla, 200 g de queso, 400 g de azúcar, 5 huevos y en vez de colorante, se pone una cucharadita de esencia de vainilla. esencia de vainilla.
   
2. Primero se hace el bizcocho con el que se van a formar los corazones. En el video puedes ver como lo he amasado. Una vez elaborada la masa, se hornea en una fuente de horno plana, porque lo que hay que conseguir es una plancha no muy gruesa, de uno o dos centímetros de alto.
   
3. Para este bizcocho es importante utilizar un colorante de color intenso y en gel, para conseguir un color limpio. Y también es importante añadirlo a la masa antes que la harina, para teñir de manera uniforme. Hay que procurar también que no queden grumitos de harina, para que no quede el bizcocho con topos blancos.
   
4. Cuando está frío, se corta con un cortador de galletas, en este caso con forma de corazón. Luego se ponen todos los corazones juntos, se envuelven en film de cocina y en papel de aluminio y se llevan al congelador. Allí deben estar el tiempo suficiente para que se congelen. Así que es bueno programarse para hacerlo en dos días, el 1º se hace el bizcocho rojo y al día siguiente se hace el bizcocho de vainilla y se termina la receta.
   
5. Se prepara la masa de vainilla, tal como se ve en el video, y en un molde alargado, engrasado y forrado de papel de hornear, se pone un poco de masa en el fondo, se colocan los corazones congelados en el centro, procurando que queden derechos y se cubren con el resto de la masa. Se hornea a 180º durante unos 45 minutos, o hasta que vemos que el bizcocho está cocido. Se deja enfriar sobre una rejilla antes de desmoldarlo.
   
6. ¡¡ Ojo!! Es importante que el bizcochco quede muy bien cocido y que el cortador utilizado para hacer los corazones rojos no sea demasiado grande, para que queden bien cubiertos y el resultado final tenga firmeza y no se rompa. Este fue mi primer intento.
   
7. Cuando hace unos días publiqué en FB mi "fracaso" me encantó el comentario de mi sobrina Belén. Y es que un mal resultado lo podemos tener todos, y aunque de momento da rabia, no hay que tirar la toalla. Es mejor ver donde están los fallos y ponerle remedio.
   
8. Así que Belén, este bizcocho va por ti ¡¡Feliz día de los enamorados!!