Preparación

1. Se extienden las almendras en una bandeja de horno y se tuestan en el horno, a 180º durante unos 20 minutos, o hasta que se ven ligeramente tostadas. Se dejan enfriar y se rallan en "granillo", quedan mas ricos los roscos si la almendra no esta totalmente rallada.
   
2. En una sartén se pone al fuego el ajonjolí y se tuesta. Es importante mover continuamente para que no se queme. Cuando está ligeramente tostado, se retitra y se deja enfriar. Se muele finamente y se reserva.
   
3. Esta receta ya la hacía mi madre y también mi abuela, cuando no contaban con robot ni amasadoras en la cocina. Todo el amasado se hacía a mano, aunque ahora viene genial poder ayudarse de un robot, como puedes ver en el video para facilitar todo el proceso.
   
4. En el amasado tradicional, se pone la manteca en un bol y se bate durante unos diez minutos, hasta que quede maleable. se añade el azúcar y se sigue batiendo, con unas varillas o una pala, o como lo hacía mi madre, con la mano.
   
5. Cuando el azúcar está bien integrada con la manteca, se añaden los huevos uno a uno. Cuando uno se ha integrado, se añade el siguiente.
   
6. Se añade la harina tamizada junto con la canela, la almendra, el ajonjolí y la ralladura de un limón, y se bate bien hasta que todo queda integrado. Se envuelve en film de cocina y se reserva en el frigoíifico durante al menos una hora.
   
7. Con ayuda de un rodillo, se extiende la masa entre dos film de cocina. para que quede la lámina del mismo grosor, es bueno contar con unas guías, como las que utilizo en el video. Se extiende la lámina de un centímetro de grosor, y con un vasito o un cortador se hacen los roscos.
   
8. Se ponen en una bandeja de horno . si es anti adherente, se ponen los roscos directamente. Si no es así, se debe utiliza un papel de hornear. A mi me gusta hornear hambien los puntos que salen de hacer los roscos.
   
9. Se pincelan con huevo batido y se rocían con un poco de azúcar y canela. Se hornean a 180º durante 25 o 30 minutos. Cuando se sacan del horno, se dejan enfriar en una rejilla.