Preparación

1. En la pescadería hay que pedir que quiten las vísceras y las escamas de los salmonetes. En casa se lavan bien, se sazonan con un poco de sal y se reservan en el frigorífico hasta la hora de prepararlos.
   
2. En una fuente apta para el horno, se pone un poco de aceite de oliva en el fondo, se colocan encima los salmonetes y se sazonan con un poco de sal gorda.
   
3. Se precalienta el horno a 200º. Cuando el horno alcanza la temperatura, se meten los salmonetes.
   
4. El tiempo de cocción depende del tamaño de los salmonetes y como siempre, depende también de cada horno. Pero hay un truco para saber cuando están en su punto óptimo, y es cuando el ojo se pone blanco.
   
5. Este es el mejor método para comprobar que están en su punto, por eso es importante no eliminar la cabeza cuando se van a hornear. En esta imagen puedes obervar como eran los ojos antes de entrar en el horno.
   
6. A este plato le sienta de maravilla un buen vino blanco frío. En mi caso un Barbadillo, un vino que me gusta mucho para pescados y mariscos.