Preparación

1. Se ralla el azúcar junto con la almendra, hasta formar una pasta. Se pasa a un bol y se añaden las yemas. Al principio parece que tres yemas es poca cosa, pero se mezclan lentamente, y se deja unos minutos, y con tres yemas liga perfectamente esta cantidad de almendra y azúcar.
   
2. Se hacen bolitas, todas del mismo tamaño. Para que no se pegue la masa en las manos, se humedecen con un poquito de agua. Se pincha una almendra arriba y listas para hornear.
   
3. Se ponen las en una bandeja de horno cubierta con papel de hornear. Deben estar un poco separadas, porque con el calor crecen un poco. Se hornean a 180º durante unos 15 o 20 minutos. cuando la casa huele a gloria y las pastas están doradas, se sacan del horno y se dejan enfriar en una rejilla.