Preparación

1. Se hace un volcán con la harina y se le añade el agua con la levadura disuelta, y también el aceite y la sal. Se amasa hasta conseguir una masa homogénea. Si es necesario, se añade algo más de harina, pero sólo la necesaria para que no se pegue la masa.
   
2. Yo la he amasado en amasadora, poniendo el gancho y todos los ingredientes en el bol. En unos minutos estaba lista.
   
3. Se puede hacer en thermomix, poniéndo los líquidos, la levadura y la sal en el vaso, y se mezcla todo unos segundos a velocidad 2. Luego se incorpora la harina y se amasa a velocidad espiga unos minutos.
   
4. Se deja reposar un par de horas la masa en un bol, tapada con un film de cocina. Por último, se extiende sobre una superficie espolvoreada con harina de semola de trigo o de maíz, dejándola lo más fina posible. Como el horno es pequeño (la piedra mide 31 cm de diámetro), yo he hecho dos, y de ese modo es más fácil extender y manejar luego la pizza.
   
5. Para evitar que se manchara la piedra refractria con el relleno, quise hacer la pizza con el borde relleno de queso Gorgonzola, sólo que no lo sellé bien, y en el proceso de cocción se abrió un poco, quedando como se ve en la foto. Al menos conseguí mi objetivo: la piedra no se manchó de quesos.
   
6. Se repaten los quesos variados y el resto del gorgonzola por la superficie y ya está lista. Se precalienta el G3 Ferrari al 2 y 1/2, se introduce la pizza con ayuda de las palas de madera, y en un momento está lista: no llegó a los 4 minutos. Se puede abrir y ver en qué momento está cocida al pizza.
   
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